Teme al temor de la muerte
- iamevolucion

- 20 dic 2020
- 2 Min. de lectura
¿No te das cuenta de que lo capital de todos los males para el hombre y de la falta de nobleza y de la cobardía no es la muerte, sino más bien el miedo a la muerte?
En eso, pues, ejercítame, que a eso tiendan todos los discursos, los ejercicios, las lecturas, y sabrás que sólo así se liberan los hombres.
EPICTETO, Disertaciones por Arriano, 3.26.38-39
Antes de suicidarse, en vez de someterse a la destrucción de la República romana en manos de Julio César, el gran filósofo estoico Catón, para armarse de valor, leyó un fragmento de Fedón de Platón, en el cual afirma: "Teméis, como los niños, que, cuando el alma sale del cuerpo, la arrastren los vientos". La muerte infunde temor porque es desconocida, nadie pude regresar y contarnos cómo es. Es un misterio.
Pese a nuestra actitud infantil e ignorante en torno a la muerte, hay muchos hombres y mujeres sabios que por lo menos nos pueden guiar. Existe una razón por la cual la gente mayor nunca parece temer a la muerte: han tenido tiempo para reflexionar al respecto (y se han percatado de lo inútil que es preocuparse). Existen otros recursos maravillosos, uno de ellos es el diario estoico que escribió Florida Scott-Maxwell durante su edad terminal: The Measure of My Days. Las célebres palabras de Séneca para reprender a su familia y amigos, quienes habían roto a llorar e implorado a sus verdugos fueron: "¿Dónde están los principios filosóficos o las lecciones que han estudiado durante tantos años contra la fatalidad?" [Tácito, Anales, 15.62]. En la filosofía hay palabras inspiradoras, valientes, de hombres y mujeres temerarios que nos pueden ayudar a hacer frente a ese temor.
Los estoicos ofrecen otra reflexión útil sobre la muerte. Si en verdad la muerte es un fin, ¿entonces a qué tememos? Tus miedos, receptores del miedo, preocupaciones y deseos perecerán contigo. Por aterradora que parezca la muerte, recuerda: supone el fin del miedo.
Holiday, R. y Hanselman, S. (2017) Estoicismo cotidiano, Océano.
20 de Diciembre
Meditación sobre la mortalidad






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