Corta los hilos que manipulan tu mente
- iamevolucion

- 15 ene 2021
- 1 Min. de lectura
Acaba alguna vez de conocer que posees en ti mismo algo más noble, más divino que los objetos que excitan en ti las pasiones y te agitan, en una palabra, a manera de un títere. ¿Cuál es ahora mi pensamiento? ¿Acaso el temor, la sospecha, la codicia u otra pasión análoga?.
MARCO AURELIO, Meditaciones, 12.19
Piensa en todos los intereses que compiten durante un minuto por tu atención, tiempo y dinero. Los científicos de los alimentos trabajan desarrollando productos para explotar tus papilas gustativas. Ingenieros de Silicon Valley están diseñando aplicaciones igual de adictivas que las apuestas. Los medios de comunicación crean historias para provocar el enojo y la indignación de la gente.
Se trata de una pequeña muestra de las tentaciones y fuerzas que nos influyen, nos distraen y nos alejan de las cosas verdaderamente importantes. Por suerte, Marco Aurelio no estaba expuesto a estos extremos de nuestra cultura moderna. Sin embargo, también conocía distractores: los chismes, el interminable reclamo del trabajo, los miedos, la sospecha y la lujuria. A todos los seres humanos nos atraen estas fuerzas internas y externas que cada vez son más poderosas y difíciles de resistir.
La filosofía consiste simplemente en poner mucha atención y esforzarse por ser más que un peón. Como afirma Viktor Frankl en La voluntad de sentido: "Al hombre lo animan los impulsos, pero los valores lo restringen". Estos valores y la consciencia de uno mismo evitan que seamos títeres. Sí, poner atención requiere esfuerzo y consciencia, pero ¿acaso no es mejor a que nos muevan con unos hilos?
Holiday, R. y Hanselman, S. (2017) Estoicismo cotidiano, Océano.
14 de Enero
Claridad






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